“Una bebida de los dioses”, estimulante, antidepresivo y más; el cacao latinoamericano revolucionó la medicina europea del siglo XVII y lo que comenzó siendo un tónico de la aristocracia se volvió, dos siglos más tarde, en la bebida más entrañable: el chocolate con leche.
Gracias a su contenido en agua, sodio, potasio, carbohidratos y proteínas de gran calidad, esta bebida es hoy un excelente alimento para la rehidratación y recuperación muscular luego de la práctica deportiva.